Dado que vivimos en una sociedad patriarcal, las mujeres están cargadas de presiones familiares, responsabilidades matrimoniales y luego deberes de cuidado de los hijos. Esto lleva a que las empleadas abandonen el trabajo. Por lo tanto, para garantizar que las empleadas puedan trabajar cómodamente incluso después del matrimonio, se les ofrece la opción de trabajo permanente desde casa para que puedan trabajar para la organización desde cualquier parte del mundo. No sólo les brinda la oportunidad de cumplir sus aspiraciones profesionales, sino que también les permite lograr el equilibrio entre la vida laboral y personal.